Yo miraba hacía delante buscando un futuro, cual futuro no importaba si era perfecto o si su terminación era en imperfecto y sonaba algo así a...: amaré. En serio, no importa como lo digas, pero dilo.
Porque hoy me como a cuchara y tenedor la oscuridad y las ventanas están tan cerradas que no puedo ni siquiera trepar por fuera, las paredes que un día yo misma fui capaz de crear.
No hay comentarios:
Publicar un comentario